Hola, soy Copi, un gusano de seda común, mi dueño me puso así como abreviatura de “Copito” ó ·copito de nieve” ya que soy muy blanco.
Voy a tratar de contaros mi breve historia vital, tan efímera pero a la vez tan intensa en unas cuantas hojas de papel.

Los gusanos de la morera somos un Lepidóptero cuyo nombre técnico es Bombix mori Linn, como insectos nos caracterizamos fundamentalmente, por elaborar una fibra única, muy utilizada en la industria textil; la explotación comercial de nosotros se denomina sericicultura (ó sericultura).
Mi madre -una mariposa de la seda- me puso en un huevo junto con un montón de hermanitos míos en Almería, hacia Junio de 2006, en Noviembre y tras recorrer más de 600 Kmts. Me enviaron en un sobre a Madrid con 120 huevos más a mi lado pegados perfectamente en un papel y a su vez envueltos en un plástico de burbujas para que no nos aplastaran, a partir de ahí todos mis congéneres y yo tendríamos a nuestro nuevo dueño que se preocuparía de nosotros durante toda nuestra vida.

¿Sabiaís esto ? Que lo inimitable de nuestras cualidades fisiológicas comienza cuando comemos y convertimos nuestro alimento en seda. Justo abajo del labio inferior, se sitúa la trompa de seda ó hilera, que es el orificio por donde sale la hebra de seda. Al deglutir, el alimento pasa por nuestro esófago y recibe el líquido secretado por las glándulas salivales. Después, este mismo líquido viscoso transforma en dextrina el almidón de las hojas de la morera y el líquido alcalino secretado por el estómago continúa la digestión y la asimilación. Las glándulas sedosas, donde se acumula la seda, tienen la forma de dos tubos alargados y brillantes, situados debajo del tubo digestivo, y se unen de modo que de la hilera sólo sale un diminuto hilito de seda.

Ibamos todos pegados al papel muy juntitos, pués este no mediría más de 4 por 6 ctms., la cáscara de nuestros huevos no mide ni un milímetro de diámetro, así que somos tan diminutos que entramos muchos en poco espacio, el cascarón es de color marrón oscuro pero a medida que se acerca la fecha de nuestro nacimiento se vuelve amarillenta, todos no nacemos a la vez, hay siempre diferencias de días y cuando lo hacemos somos tan ínfimos que los humanos tienen que mirar con lupa para vernos.
Nuestro nacimiento puede ser retardado por el hombre , a través de técnicas de estibado, hibernación e incubación. Actualmente en Argentina esta tarea está en manos de la facultad de Agronomía y Zootecnia de la UNT, que es la encargada de asegurar la calidad genética proveyendo líneas híbridas de gusanos de alto rendimiento.
En este momento no resulta conveniente la multiplicación directa por parte de los productores ya que el programa se encuentra en la etapa de perfeccionamiento.
Una vez en manos del productor, la activación de nuestros huevos se logra exponiéndolos a una temperatura de incubación de 15 grados el primer día, 20 grados el segundo y 25 grados los días que queden hasta el nacimiento (que se produce dentro de los 14 días siguientes).
La fecha de activación debe coincidir con el brote primaveral de las moreras, ya que sus hojas serán el alimento de nuestras larvas.

En nuestro caso, mi nuevo amo dispuso siete cajas de cartón, abiertas por arriba, perfectamente limpias, sin restos de cola, disolventes ni otras sustancias para todo el proceso de nuestra metamorfosis que ahora pasaré a contaros.
Reservó 6 cajas y nos puso a nosotros en nuestra lámina de papel en el centro de la otra esperando el acontecimiento que sería nuestro nacimiento, todos los días miraba nuestros huevos buscando un brote de vida, hasta que por fín a primeros de Mayo y después de 300 días encerrados en el huevo, empezaron a nacer mis primeros hermanitos, lo primero que hacemos es colgarnos de un hilito finísimo de seda y alimentarnos de nuestra propia cáscara del huevo, instantáneamente nuestro cuidador trajo unas hojas de morera para que comiéramos, como somos tan pequeños, las parte en trocitos con los dedos y elige los tallos mas frescos de la morera, teniendo en cuenta que están empezando a crecer y hay muy pocas todavía, él las escoge con sumo cuidado para no romper el tallo, tienen que crecer más sin romperlas ya que pronto comeremos muchísimo.
Tened en cuenta que al nacer, medimos tan solo 2 ó 3 mts., de largo por uno de grueso, desde ese momento la naturaleza nos llevará a comer, por lo que debe existir siempre suficiente hoja de morera, que será nuestro alimento

En este vídeo aparezco yo con mis congéneres